Museo Nacional del Prado
El Museo Nacional del Prado, que se creó como museo de pintura y escultura, tiene también colecciones importantes de dibujos (más de cinco mil), grabados (dos mil), monedas y medallas (cerca de mil), y casi dos mil piezas de artes suntuarias o decorativas. La escultura a su vez está representada por más de setecientas piezas y por una cantidad menor de fragmentos escultóricos.
Pero la colección de pintura con su enorme riqueza, en cantidad (ocho mil seiscientas pinturas) y en calidad, ha oscurecido la importancia de las otras colecciones. Aún así, dada la endémica limitación de espacio, el Museo Nacional del Prado sólo puede exhibir, en sus dos sedes, la más rica selección posible de sus pinturas (una séptima parte aproximadamente) y de sus esculturas; y aún éstas lo están con un criterio decorativo, al igual que algunas piezas de mobiliario y artes suntuarias (salvo la exhibición completa, y como conjunto ordenado, de El Tesoro del Delfín).
Los fondos de la colección de pinturas se articulan en tres conjuntos fundamentales: las pinturas que proceden de las colecciones reales (poco más de tres mil), las que aportó la fusión con el Museo de la Trinidad (que rebasan ligeramente las dos mil) y el fondo llamado de Nuevas Adquisiciones (más de tres mil quinientas) que es el bloque vivo en el que se asientan desde las primeras adquisiciones que realizaron ya museos como el del Museo Nacional del Prado y el de la Trinidad mientras existió, hasta los últimos ingresos. Estas adquisiciones han venido siendo por compra, por donaciones y legados, y también por suscripciones públicas.
Paseo del Prado, s/n, 28014 Madrid